El año pasado Yemen superó un hito devastador: desde 2015 diez mil niños han sido asesinados o mutilados. Y al aumento de combates que se produjo durante el 2021 se añadieron las fuertes lluvias que amenazaron la infraestructura y destruyeron albergues de desplazados internos -unos 4 millones de personas, de las cuales la mitad son niños-. A ellos se sumaron más de 300 mil migrantes, refugiados y solicitantes de asilo.
Por otra parte, dos millones 300 mil niños sufren de desnutrición aguda, más de quince millones de personas viven sin agua o saneamiento, y veinte millones sin servicios de salud. En estas condiciones hay casi 27 mil casos sospechosos de cólera y una permanente amenaza a los programas de inmunización contra polio, sarampión y Covid-19.
Gracias a tu apoyo, UNICEF asistió a los niños, niñas y sus familias desplazadas, enfrentó la desnutrición y continuó con los programas de vacunación y suministro de agua potable, además de desarrollar actividades educativas para apoyar a niños y niñas en riesgo frente al conflicto armado.